Moisés y Valdo han podido confirmar esta mañana, en la resonancia que se les ha practicado, el tiempo que deberán estar de baja. Mientras el centrocampista sufre una lesión muscular de grado uno en los isquiotibiales de la pierna izquierda, que le tendrá de baja un par de semanas, el segundo, sufre una lesión similar de segundo grado en los isquiotibiales de la pierna derecha. En su caso, se espera que esté fuera de los terrenos de juego unas cuatro semanas. A ambos jugadores se les practicará una ecografía de control el próximo miércoles para confirmar los diagnósticos y el tiempo de curación.
El Espanyol empata en Pucela pero aumenta su cuota de lesionados.
Moisés puede estar fuera del equipo 2 semanas.
Moisés se lesionó a los 20 minutos de juego. Una contractura en los isquitibiales le puede dejar 15 dias fuera.
Dos equipos heridos, con similares urgencias en las últimas semanas, se citaban en medio de un clima gélido. Los dos necesitaban el calor de la victoria, aunque por motivos bien distintos. Los pucelanos, instalados en una zona relativamente tranquila de la clasificación y con margen de puntos suficiente para evitar la zozobra, acudían al partido con la obligación de enderezar su andadura liguera después de cuatro derrotas consecutivas. Los blanquiazules, que buscaban la perdurabilidad del 'efecto Pochettino', querían una nueva victoria en Liga, algo que se resiste desde la primera semana de noviembre. Una eternidad para un equipo que anhela y necesita salir de abajo y enterrar sus nervios.
Como insinuó el flamante técnico blanquiazul, desde esta semana comienza otra Liga para los blanquiazules. Un campeonato que tiene mucho de etapa contrarreloj en la que hay que recuperar una pequeña porción de tiempo cada kilómetro recorrido.
El Espanyol recordaba, antes de salir, que el año pasado aquí, en Valladolid, en el mismo primer partido de la segunda vuelta, comenzó a dejar escapar el crédito que había conseguido en el inicio. Y otros, que hace unos años, se repitió una historia similar con el Valladolid comodísimo en la tabla y el Espanyol en la misma cola, pero una nefasta segunda vuelta de los pucelanos les envió a Segunda. Sabiendo eso, Pochettino confió en los mismos hombres que el pasado miércoles tutearon al Barcelona, pero el puzzle se fue descomponiendo. Moisés, lesionado, tuvo que dejar el campo en el minuto 20 y Pareja, en el descanso. Aunque Kameni no pasaba por demasiados peligros, el Valladolid se acercaba con relativa insistencia a su meta, tanta como Sesma y Pedro León le pusieron con sus remates cruzados.
El Espanyol oponía cierto criterio a la hora de manejar el balón, pero Luis y Callejón se encontraban demasiado desasistidos entre medio de la defensa local. Pochettino gritaba, corregía, gesticulaba, ordenaba… pero en una acción desafortunada, Goitom empujó de tacón dentro del área pequeña para adelantar a su equipo. Antes Luis había provocado una espectacular parada de Justo Villar en un servicio de falta.
El gol local, rozando el descanso, tranquilizó a los albivioletas que comenzaron a pensar, entonces sí, que pondrían fin a su racha negativa. Los tres puntos podían ser oro puro para quien los lograra.
La segunda mitad comenzó con más brío y energía. Luis puso de nuevo a prueba los reflejos de Justo y Kameni tuvo que emplearse a fondo con un par de chuts de Pedro León y Sesma, un incordio toda la tarde.
Para acabar de complicarlo todo (sólo había que ver el gesto de desesperación de Pochettino en la banda), Valdo también tuvo que retirarse lesionado, lo que ha vuelto a incrementar la nómina de jugadores en la enfermería.
Cuando parecía que todo se volvía en contra, Sergio Sánchez aprovechó un hueco entre la defensa local, para colocarse en el segundo palo y cabecear al fondo de la red un córner de Luis García. Con el empate comenzó otro partido, mucho más abierto y también más incierto. El Valladolid se sintió herido y aceleró, pero el Espanyol replicó con orgullo y contragolpeó pensando que sí, que se podía, que aún se puede, que todavía hay mucha tela que cortar en esta Liga.
Ficha técnica:
Real Valladolid CF: Justo Villar, Marcos, García Calvo, Borja, Goitom (Aguirre, min. 83), Pedro León (Óscar, min. 72), Pedro López, Luis Prieto, Álvaro Rubio, Sesma y Canobbio.
RCD Espanyol: Kameni, Sergio Sánchez, Román, Valdo (Rufete, min. 70), Callejón, Luis García, Beranger, Nico Pareja (Lacruz, min. 46), Nené, Jarque, Moisés (Lola, min. 20).
Antes del inicio del partido se guardó un minuto de silencio en memoria a las víctimas del temporal de viento, en especial por los cuatro niños que perdieron la vida en Sant Boi de Llobregat.
Un mejorado Espanyol trata de tú a la versión del Barcelona más gris de esta temporada
Tomás Guasch 22/01/2009
El corazón y el acicate del nuevo entrenador le dieron aire al Espanyol en su envite copero con el Barça, en partido de poco fútbol. El interés perico le valió para aplazar una semana la decisión de la eliminatoria. El por muchos anunciado paseo azulgrana no se produjo. Es más: si alguien mereció ganar, siempre por la mínima, fueron los periquitos, sobre todo en la primera parte. Llegaron más hasta Pinto (Luis García, Valdo, Callejón...) que sus rivales ante Kameni. El Barça tiró por primera vez a puerta (Iniesta) a los 32 minutos. Fue su versión más gris del año. Y sí: el equipo de Guardiola pasó con absoluta discreción por Montjuïc, más atento a no perder que a ir por el partido. Dio por bueno el 0-0, pero ahora cualquier empate a goles en el Camp Nou clasificaría a los de Pochettino. Igual estamos a ocho días del gran zambombazo. ¿Una utopía? Probablemente. De momento, el Espanyol consiguió dejar al Barça a cero (no pasaba desde el primer partido de Liga, 1-0 en Soria) y rompió su racha de trece triunfos fuera de casa, ocho en Liga, dos en Copa y tres en Champions.
Más corto.
Todo eso pasó porque el Espanyol fue otro (si hubiese jugado con ese interés tendría en Liga más de 15 puntos) y porque sin Messi, Alves y Xavi el Barça es otro, más cortito y previsible. La rápida lesión de Márquez le dejó además sin un jugador capaz de sacar la pelota desde atrás. Con Iniesta volcado a la izquierda, no hubo magia en el centro del campo azulgrana. Sólo pelea, que el rival anuló y hasta superó mientras tuvo fuerzas. Le faltó el gol a los blanquiazules, pecado mortal este año, y cuando entró Messi era tarde. Pochettino debutó con buen pie para su afición, que despidió al equipo con una gran ovación y una certeza: su reto está en la Liga y el gustazo en el Camp Nou es posible.
Espanyol: Kameni; Sergio Sánchez, Jarque, Pareja, Beranger; Valdo, Moisés Hurtado, Román Martínez (Lola, m.77), Nené (Jonathan Soriano, m.84); Luis García y Callejón.
Árbitro: Sr. Muñiz Fernández (C.Asturiano). Amonestó a Luis García (m.17), Cáceres (m.45), Moisés Hurtado (m.48), Víctor Sánchez (m.66), Beranger (m.86) y Lola (m.89).
Incidencias: Partido correspondiente a la ida de los cuartos de final de la Copa del Rey disputado en el Estadio Olímpico de Montjuïc Lluís Companys ante 21.915 espectadores.
Moisés y Oscar asumirán hoy junto a Román la reponsabilidad del centro del campo blanquiazul
El pasado miércoles, en la Copa del Rey, es cierto que se volvió a jugar mal, muy mal, pero al menos se consiguió el primer triunfo desde que Mané ocupa el banquillo españolista. Ahora ya sólo falta que se estrene en la Liga y comience la reacción de una vez por todas. Para lograrlo, el técnico vizcaíno se ha encomendado a un chaval de 17 años, que demostró muy buenas maneras hasta que las lesiones frenaron su progresión. Oscar Sielva será hoy titular y llevará la manija del centro del campo, ocupando el pivote junto a Moisés y jugando por detrás de Román Martínez. El argentino será otra de las grandes novedades tras ganarse la titularidad a base de goles.
"Estamos en un mal momento anímico y deportivo y tenemos ganas de sacar esto. El equipo necesita el apoyo incondicional de la afición”.
La actual situación deportiva del Espanyol no pasa desapercibida para la plantilla blanquiazul. Los jugadores asumen la relevancia que tienen los próximos enfrentamientos tanto de Liga como de Copa del Rey. Moisés Hurtado no ha ocultado que “la situación está complicada y lo seguirá estando si no sacamos puntos en los próximos partidos”, ha comentado ante los partidos más inmediatos. “Lo que no sea sumar es malo. En nuestra mente está sumar todos los puntos posibles. De momento tenemos equipos muy cerca para salir del descenso y luego ir escalando posiciones”.
El centrocampista ha reconocido que “se nota cierto pesimismo y, en parte, lo hemos creado nosotros. No estamos dando la talla. Es algo que viene del final del año pasado. En estos momentos es importante pedir el apoyo del público. Estamos en un mal momento anímico y deportivo y tenemos ganas de sacar esto. El equipo necesita el apoyo incondicional de la afición”.
Moisés, que ya está recuperado de sus problemas físicos, ha reconocido que está en condiciones de poder jugar. “Me he encontrado bien y he podido entrenar a tope. ¿El Málaga? Es un equipo que ha sorprendido por su trayectoria. Tiene las ideas muy claras y basa su juego en una buena defensa y en la estrategia. Su entrenador es un técnico de la casa que tiene las cosas muy claras”. El jugador de la cantera ha insistido que “tenemos una eliminatoria importante, pero, por nuestra situación en la Liga, es la competición más importante. Vamos a ir tope todos los partidos. El Barça se está mostrando intratable, pero en un derbi puede pasar de todo. El partido del Málaga es vital y nadie piensa, por ahora, en el partido de Copa”.
Su gol en el minuto 94 evitó el triunfo del Almería.
Tomás Guasch 12/01/2009
Lo que vaya a pasar con el Espanyol al final de esta Liga está por ver. Cuántos periquitos lleguen vivos para contarlo, también. Este sufrimiento no es humano. ¡Es que no acaban de sentarse y su equipo ya pierde! Y para verlo empatar deben esperar al alargue. No han cometido pecado tan grave para merecer esta penitencia. ¡Qué horror!
Y sí. Llegan, se sientan, cuatro minutos y gol de Uche. Su equipo no tira a puerta hasta el minuto 40. El rival puede liquidar la cosa, pero no lo hace. Uche casi lo consigue, pero cabecea fuera. El 0-1 casi lo dan por bueno los de casa, esperando un segundo tiempo mejor. Si, si... Ni diez minutos más y 0-2, otra vez Uche. ¿Saben? Estuvo fichado por el Espanyol, pero recelaron de sus papeles y acabó marchándose. Nigeriano de nacimiento, se presentó con pasaporte portugués. Sonaba raro y le cedieron al Wisla polaco. Volvió y se esfumó. Nigeriano, portugués, polaco de adopción, en Montjuïc no ha habido un delantero como él, uno de esos africanos que llegan y te ayudan muchísimo.
El caso es que él solito puso el 0-2 en los dos primeros remates a puerta de su equipo y no hizo el tercero tras robarle la pelota a Kameni en una mala salida de milagro. Con la parroquia pidiendo la cicuta, Mané puso a Román. Que no será un rayo de rapidez pero tiene fútbol y eso no le sobra a su equipo. Con Román en el campo, el Espanyol jugó mejor y el Almería fue desdibujándose. Román cazó una pelota que no pudo blocar Alves y puso el 1-2. A partir de ahí su equipo mandó. Sin claridad ni contundencia, pues desde que se lesionó Tamudo hace dos meses ni un delantero españolista ha conseguido marcar. Pero mandó.
Román. A base de corazón, que será siempre el clavo al que se agarran los equipos sin duende, el de Mané (tres puntos de quince jugados lleva el vasco) se fue hacia adelante. Coro falló un gol que se cantaba, pues envió alto un remate cerca de la portería aunque escoradillo a la derecha. Pellerano salvó bajo palos un tiro de falta de Luis García. Para entonces, el equipo de Hugo se había equivocado del todo. Dejó de ser el bloque bien plantado y ambicioso del primer tiempo y se echó hacia atrás fiándolo todo a una buena defensa y al contragolpe decisivo. Se acomodó, como hacía Hugo en el Camp Nou, y lo pagó caro.
Le pasó que en el largo alargue de siete minutos (pueden haber alargues cortos), Bruno cuerpeó a Luis y le pitaron una falta que protestó amargamente. Igual se lo vio venir. Pareja, buen lanzador, la ejecutó con maestría. Fue el 2-2 y el suspiro periquito se oyó hasta en Almería, donde suspiraron pero al revés. Por dos puntos que se esfumaron cuando estaban en el bote. 2-2. ¡Lo que queda por sufrir!
Árbitro: González Vázquez, del comité gallego. Mostró cartulina amarilla a Corona (min.34), Sergio (min.59), Luis García (min.59), Chico (min.66), Pareja (min.70), Moisés (min.78), Chica (min.90), Bruno (min.90+), Jarque (min.90+) y Román (min.90).
Incidencias: partido correspondiente a la decimoctava jornada de la Liga, disputado en el Estadio Olímpico de Montjuïc Lluís Companys, ante 11.325 espectadores, según datos facilitados por el RCD Espanyol.
Moisés Hurtado ha alcanzado la madurez futbolística
Pese a la mala racha del equipo, el de Sabadell sigue siendo una pieza básica, y ahora, hasta marca goles
Xavi Canals
Sin hacer mucho ruido, Moisés Hurtado se ha convertido en los últimos años en una pieza indiscutible del Espanyol. Tanto que el próximo domingo, cuando el Almería visite Montjuïc, alcanzará el centenario de partidos de Liga en Primera División. “Personalmente, es una cifra que me llena de orgullo”, reconoce el de Sabadell, quien también considera que “es muy difícil alcanzarla al máximo nivel”.
El centenario de Moisés no llega ni mucho menos en el mejor momento del Espanyol, sumido en la zona de descenso. Por eso, el futbolista tiene claro que “me gustaría celebrar el partido cien con una victoria, pero más que nada porque hoy por hoy es básico conseguir un triunfo, y más en casa con nuestra afición”.
Sobre su situación personal, Moisés reconoce que ahora está mejor que a principios de temporada, pero no justifica esta mejoría por el cambio de entrenador: “Por mis características, siempre empiezo las temporadas un poco bajo físicamente. Ahora estoy mejor, pero creo que no fue el problema con Márquez. Era una cuestión de posicionamiento, de estar juntos, porque de lo contrario tienes más recorrido y debes hacer más esfuerzo”.
El centrocampista no esconde su aprecio por ‘Tintín’ Márquez, pero si tiene que quedarse con un entrenador de su carrera deportiva se decanta por Lotina: “El fue quien me hizo regresar tras mi cesión al Eibar y esas decisiones siempre son complicadas. Le agradeceré toda mi vida lo que aprendí a nivel táctico. Transmitía muchos conocimientos que me han valido para madurar”.
A la hora de recordar el momento más emotivo y el que querría olvidar, los dos están relacionados con la final de la UEFA: “Lo mejor fue el recibimiento tras la final de Glasgow y el peor momento fueron los últimos minutos de ese partido tras la expulsión”. Moisés ganó una Copa del Rey.
Y para el próximo aniversario, un deseo sincero: “Me encantaría cumplir los 150 la próxima temporada en Cornellà jugando en Primera División”, señala el canterano.
Moisés y Luis García advierten que al Espanyol le urge ganar ya como sea para remontar
Señalan que ahora todos los partidos serán finales, empezando por el Almería el domingo
Rogelio Román - 09/01/2009
Catorce puntos de cincuenta y uno posibles en Liga, terceros clasificados por la cola, dos largos meses sin conocer una victoria y escaldados por la derrota última en Copa ante el Poli Ejido, los jugadores blanquiazules empiezan a verle las orejas al lobo. Tras el varapalo en la Copa, ayer en Sant Adrià ya pensaban en el Almería, que el domingo visita Montjuïc. Partido considerado a vida o muerte, porque tal como apuntaron Moisés Hurtado y Luis García, para quienes la victoria ya no puede esperar más.
"Todo lo que no sea ganar no vale de nada. Hay que sumar de tres en tres ya, porque la salvación está en 42 puntos y cada vez tenemos menos tiempo de reacción. Debemos darnos cuenta de que la situación es complicada. Necesitamos una victoria como el comer", reflexionó Luis García. "Vamos a reaccionar el domingo, ante el Almería, estoy convencido. Hay que empezar a entrar en una dinámica buena. Sobre todo porque ya nos toca", abundó Moisés.
Tanto el delantero como el centrocampista coincidieron en señalar que la situación empieza a ser preocupante. "De aquí hasta que acabe la temporada todos los partidos van a ser finales, estoy convencido. No va aser fácil salir de donde estamos. Al contrario, nos va a costar mucho, y hasta el final estaremos peleando por abandonar la zona baja. Esa esla realidad", dijo sin medias tintas Moisés.
Luis García tampoco esconde que están en situación extrema. "Será una guerra por los puntos el domingo frente al Almería. Ganar significaría una inyección de moral tremenda para nosotros. La gente se crecería. Si ganas un partido, es como si se abriera una luz y se vería todo distinto", admitió el delantero.
"Cuando está todo muy pesimista, si no te convences de que puedes ganar, no ganas. Sales al campo con ansiedad, pensando que vas a perder y pierdes. Por lo tanto no queda otra que apretar los dientes y pensar que debemos ganar ya", advirtió Moisés.
¿Y qué hacer cuando se intenta ganar y no sale? Luis García y Moisés coincidieron en la receta a aplicar. "Hacer las cosas sencillas. Primero, empezar por la A y luego pasaremos a la B. Porque en estos momentos no sale nada. Intentas un regate y no sale; un caño, y tampoco", comentó Luis García. "Hacer todo más sencillo, sin cometer errores. Ser fuertes atrás, tratar de mantener la portería a cero. Eso te da la vida. El Espanyol tiene los mismos argumentos que el 95% de los equipos de Primera. Pero la realidad es que hoy por hoy hay diecisiete equipos mejor que nosotros, al menos por clasificación. Mira el Zaragoza el año pasado. Se fue a Segunda con Milito, Oliveira y todo el dinero que se gastó. Nadie está exento de un accidente así. Para evitarlo hace falta compromiso, responsabilidad y sacrificio. Y demostrarlo sobre el césped", argumentó Moisés.
Convencidos ambos de que "el apoyo de la afición para salir de esta es fundamental", Luis García admitió que en lo personal "paso por la peor racha desde que estoy en el Espanyol en el aspecto goleador". Pero recuerdó que "de pequeño un técnico me dijo que el que tiene gol, tarde o temprano lo vuelve a manifestar. Estoy fuerte física y mentalmente. El gol volverá".
Ambos admiten que el vestuario "está dolido" por lo sucedido ante el Poli Ejido. "El riguroso penalti condicionó el partido tras el gol de Moisés", dijo Luis García. Y apostilló: "Cuando peor estas, el contrario piensa que todo lo hará bien. Como el tercer gol del Poli, un golazo, pero seguro que no lo repetirá nunca. Aunque las eliminatorias de Copa son de 180 minutos y no está todo decidido"
No vio el gol con la mano de Messi, pero si la de Pareja
Moisés Hurtado era otro de los miembros del Espanyol que estaba muy enojado con Rodríguez Santiago. El centrocampista comentó que “no puede ser que me saque una tarjeta sólo por decirle ‘otra vez igual’ en la jugada del penalty”. El Espanyol tiene intención de recurrir esta tarjeta para que pueda jugar la vuelta. Luis García, por su parte, recordó que “este árbitro siempre se equivoca en nuestra contra. Ya son demasiadas veces. A mí me expulsó de manera injusta el año pasado frente al Athletic”. También fue en la Copa.
Los goles de Moisés y de Román Martínez no fueron suficientes
Tercer gol de Moisés esta temporada
Agencias - 07/01/2009
El Polideportivo Ejido supo prolongar su buen momento liguero en la Copa del Rey y sorprendió al Espanyol con una victoria por 3-2. El Poli, segundo en la tabla del Grupo IV de Segunda División B, repitió un sonado triunfo copero -tras golear anteriormente al Villarreal- y se aprovechó de un Espanyol en horas bajas al estar metido en zona de descenso.
Los locales salieron con muchas ganas al inicio y la primera ocasión fue para ellos (minuto 3), cuando Juli desde la diagonal del área se internó rápidamente en la frontal y disparó fuerte obligando a lucirse a Kameni para evitar el primer gol de la noche. El conjunto barcelonés se mostraba muy ordenado en defensa ante un Polideportivo Ejido con mucha mordiente, que presionaba mucho en el área catalana y que de nuevo lo intentó con Molina en el minuto 7, pero paró Kameni.
Poco a poco el Espanyol fue metiéndose en el partido con internadas por las bandas de Valdo y Nené y pasado el cuarto de hora un saque esquina botado lo cabeceó Moisés, que puso el 0-1. El tanto en contra frenó un poco al Espanyol y el Poli trató de buscar una igualada, y en el minuto 28 Juli centró desde la izquierda a Gregory pero su lanzamiento salió alto. Con el paso del tiempo ambos equipos perdieron fluidez y en el minuto 37 un centro desde la derecha de Nené llegó a Luis García, pero su disparo salió fuera, y poco antes del final del primer tiempo Juli y Molina lo intentaron en sendas ocasiones y en ambas detuvo Kameni.
En el segundo tiempo del encuentro el Polideportivo Ejido consiguió empatar en el minuto 52 tras un penalti que transformó Jorge Molina. El Espanyol reaccionó al contragolpe y tuvo una oportunidad en un centro de Nené sobre Callejón, que disparó dentro del área pero la pelota dio en un defensa. Juli dio la ventaja a su conjunto y puso el 2-1 con un gran gol (minuto 60), y después Jorge Molina pudo marcar en el uno contra uno ante Kameni pero su disparo se marchó fuera. Los espanyolistas lograron volver a poner tablas con un gran disparo por alto de Román, ante el que nada pudo hacer el guardameta ejidense (minuto 71).
No obstante el equipo local no se vino abajo y Román (minuto 75), con un gran disparo desde fuera del área devolvió la superioridad a su conjunto en el electrónico. Hasta el final del partido el Espanyol, que se quedó con diez, lo intentó en algunos acercamientos y el equipo almeriense se concentró en defenderse para conservar su ventaja.
FICHA TÉCNICA
Polideportivo Ejido: Razak; Raúl Gaitán, Victor Gomis, Raúl Torres, Charpenet, Robles, Mikel Rico (Chico, m.67), Gregory, Juli, Nakor Bueno (Juan Díaz. m.79) y Jorge Molina (Diego Gascón, m.80).
RCD Espanyol: Kameni; Chica, David García, Valdo, Callejón (Jonatan Soriano, m.64); Luis García, Angel, Nino Pareja, Nené (Román, m.61), Torrejón y Moisés.
Arbitro: Rodríguez Santiago (Castellano-Leonés). Amonestó a los locales Mikel Rico y Juli y a los visitantes Valdo, Nino Pareja y Angel Expulsó de doble amarilla al visitante Moisés (m.80).
Incidencias: partido disputado en el estadio Santo Domingo de El Ejido ante 2.500 espectadores. Terreno de juego en buenas condiciones.
Si se le añade la autoría del gol a su aportación con y sin balón, vale por tres hombres.
Resumen del partido Athletic - RCDE. Gol de Moisés.
Jose L. Artetxe 05/01/2009
Una genialidad de Andoni Iraola impidió que el Espanyol de Mané estrenase su casillero de triunfos. Fue de chilena, un lance tan inesperado como brillante tanto por la autoría como por el contexto, como pudo el Athletic eludir la derrota y, de paso, rebajar el logro periquito en La Catedral. Un punto para cada uno y no hay mucho que debatir, tras noventa minutos muy peleados y sin apenas margen para el lucimiento o la originalidad. Al Espanyol todavía se le puede permitir un breve pataleo porque acarició lo que podía haber sido el principio de su reacción, pero también el Athletic se batió el cobre y dispuso de opciones en grado similar para al menos hacer su golito, que en este caso fue golazo. Para más no jugaron los rojiblancos, para quienes este resultado, sin ser negativo del todo, supone bajarse de la nube en la que se instalaron antes del parón navideño.
San Mamés dejó ayer de ser territorio prohibido. Acababan de desfilar por su césped, como en procesión fúnebre, los Osasuna, Numancia y Sporting, todos ellos con similares apuros clasificatorios a los que padecen los periquitos, aunque lo cierto es que éstos exhibieron más oficio que aquellos, se resistieron con dignidad a asumir el papel de víctima propiciatoria que el pronóstico les adjudicaba y terminaron rozando la gloria, que a eso les hubiese sabido la victoria.
Al final, el equilibrio lo puso el factor que el Athletic siempre tiene a mano cuando actúa ante su afición y que se convierte en básico cuando no sale nada. Ese tirar de rabia y de orgullo, empujar y percutir con constantes envíos a sus delanteros desde donde sea, un día más fue rentable y minimizó los secuelas de un rendimiento global deficiente, muy deficiente a ratos.
Por lo visto desde la primera jugada del partido, el Espanyol pareció encantado con la idea de alcanzar el descanso con el puntito que de entrada y graciosamente concede la Federación. No sin esfuerzo, desde luego, pero dicho objetivo además de razonablemente ajustado a la inversión realizada por los chicos de Mané, retrataba también con bastante fidelidad el meritaje del Athletic, cuya iniciativa careció de enjundia.
Serios. La tarde, la verdad, corría favorable a los intereses periquitos. Después de un par de sustos, ajustaron sus líneas, Moisés ejerció de chico para todo, a menudo de tercer central, nadie se permitió frivolidades, salvo Nené, que sin ellas no sería él, y con eso y poco más, les llegó para dejar en muy poco el afán de su rival.
Moisés se tuvo que fajar en el juego aéreo, para anular a Llorente FOTO: RCDEspanyol.com
Desde que Javi Martínez rematase a la madera, tras ligero desvío enemigo, un pase de la muerte de Susaeta, no hubo más noticias rojiblancas. Dicha acción se registró en el 21, cuando todavía no estaba muy claro si el planteamiento prudente del Espanyol bastaría para impedir que el Athletic ampliase a cuatro su racha de victorias como anfitrión.
Luego, el paso de los minutos invitó a pensar afirmativamente, a conceder crédito a una estrategia lógica para un equipo que vino a Bilbao en descenso. Ahora bien, tampoco cabía prever lo que ocurrió cuando Moisés puso su coronilla a la salida de un córner, porque el Espanyol no se había ni dignado previamente a pisar el área de Iraizoz.
El gol dejó aturdido al anfitrión y ahí pudo apuntillar el Espanyol por dos veces, pero bueno, quejar no se podía quejar por gozar de ventaja mínima en el intermedio. A la vuelta, el Espanyol salió mirando hacia arriba y Caparrós lo debió de ver fatal porque enseguida movió el banquillo: primero el capitán y luego el recién aterrizado Toquero.
Dos delanteros frescos para una ofensiva espesa, nacida del corazón y apenas salpicada de detalles de Susaeta y de Iraola. Así, sin que Kameni protagonizase parada alguna, se enfiló la recta final, con el Espanyol cada segundo más metido atrás y con el Athletic desmelenado y sufriendo por la ausencia de Llorente, al que se comieron entre Jarque, Pareja y Moisés (y el árbitro). Entonces, en el penúltimo arreón, Iraola sacó su varita mágica y aún hubo tiempo para otro par de barullos que no afectaron a un empate sin pena y sin gloria.
El detalle. Primer punto de Mane en Bilbao Ganar no ganó, pero al menos José Manuel Esnal, Mané, pudo romper la estadística negativa que arrastraba como técnico visitante en La Catedral. El empate de ayer atenúa el signo de la derrota que presidían sus números tras cinco oportunidades.
Árbitro: Paradas Romero (Colegio andaluz). Mostró tarjeta amarilla a los locales Ocio, Balenziaga y Gurpegui, y a los visitantes Pareja, Rufete, Jarque y Kameni.
Incidencias: Unos 37.000 espectadores en San Mamés. Tarde fresca y terreno de juego con alguna calva. Decimoséptima jornada de liga.
