El Espanyol ya acaricia el sueño de Glasgow El Espanyol empezó a comprar anoche el billete para Glasgow en un partido muy brillante e inolvidable
El Espanyol ya toca con la punta de los dedos la final de la Copa de la UEFA. La gran fiesta futbolística que vivió anoche Montjuïc acabó con un 3-0 que, olvidándose del mazazo de hace 19 años, debe ser suficiente para estar en Glasgow. El equipo de Valverde recordó las brillantes gestas de antaño. Pasarán los años y, ocurra lo que ocurra a partir de ahora en la competición, los pericos recordarán el partidazo de ayer. Fue espectacular.Espectacular en todos los sentidos. Todo salió a la perfección. Empezando por una afición que se volcó con su equipo, que creó un ambiente de animación que llegó a poner la piel de gallina; y siguiendo por unos jugadores que pasaron por encima del rival. El Espanyol, claramente, avasalló a todo un Werder Bremen, uno de los conjuntos más potentes de Europa. Y eso tiene mucho, mucho, mérito.El Estadi Olimpic fue escenario de un partido intenso y muy emocionante. La actuación del Espanyol fue la de un equipo que había preparado hasta el más mínimo detalle el encuentro, frente a un adversario que demostró, sin duda, ser el más fuerte que ha pasado por Montjuïc en la Copa de la UEFA. El Werder Bremen causó una grata impresión hasta que la apisonadora españolista le pasó por encima. Son una escuadra muy equilibrada y con personalidad en el campo, pero no pudo con la ilusión del rival.IIusión y también calidad. El grupo de Ernesto Valverde supo sacar rentabilidad de sus virtudes. Fue un Espanyol muy ordenado, muy bien posicionado en el terreno de juego; coordinado perfectamente las ayudas tanto en defensa como en ataque, que supo sobreponerse al gol anulado a Jarque, bien anulado, por fuera de juego.El Espanyol rompió la semifinal en dos acciones de estrategia y en minutos claves. En un saque de esquina marcó Moisés el 1-0. Era el minuto 20 y el gol reafirmaba la ilusión de los locales.El 2-0 lo anotó Pandiani, también tras un saque de esquina, en el minuto 50, lo que frenaba cualquier atisbo de reacción visitante. La puntilla final para los alemanes llegó un poco más tarde (58’) cuando el colegiado expulsó a Wiese por derribar a Tamudo. La semifinal estaba ya clara, era cuestión de no cometer ningún error infantil.El Espanyol jugó entonces con mucha cabeza. Esperó su momento para dar la puntilla final con el gol de Coro. El 3-0 debe ser suficiente para llegar a Glasgow. Dejense ya de viejas pesadillas. Es un resultado que se habría firmado antes del encuentro. Queda, sí, la vuelta. Será terrible, sin duda. Seguro que el Werder Bremen no ‘tira la toalla’, pero el Espanyol se ha ganado el respeto de todos. Anoche compraba parte del billete para estar en Glasgow. Es el momento de asumir que los blanquiazules son favoritos. Quedan sólo 90 minutos para que el sueño sea una realidad.
Ficha técnica:
Espanyol: Iraizoz, Lacruz, Torrejón, Jarque, David García, Rufete (Corominas, min.83), Moisés Hurtado, De la Peña (Jonatas, min.78), Riera, Tamudo y Pandiani (Ito, min.72).
Werder Bremen: Wiese, Fritz, Pasanen, Naldo, Owomeyela, Frings, Baumann (Vranjes, min.77), Jensen (Reinke, min.58), Diego, Hunt y Klose (Almeida, min.73).
Goles: 1-0: Moisés Hurtado (min.19); 2-0: Pandiani (min.50); 3-0: Coro (min.87).
Arbitro: Tom Henning Øvrebø (Noruega).
Amonestó a los locales Moisés Hurtado (min.24), Pandiani (min.67) y a los visitantes Baumann (min.36) y Fritz (min.94). Expulsó con roja directa a Wiese (min.58).
Incidencias: Partido correspondiente a la ida de las semifinales de la Copa de la UEFA, disputado en el estadio olímpico Lluís Companys ante 40.250 aficionados.
Fuente: Diario Sport