MOISÉS: EL HOMBRE EN LA SOMBRA

El centrocampista sin hacer ruido se ha convertido en un fijo para Valverde, dando mucha solidez al equipo.

Su nombre significa en hebreo rescatado, y ciertamente le va ni pintado a su situacion, ya que el Espanyol lo recuperó el año pasado despues de su cesion al Eibar, en segunda divison, cuando su futuro como miembro de la plantilla de la primera división parecia perdido, como el de muchos otros miembros de su generación de juvenil como Javi López, Bruno Saltor, Raúl Vates, David Català, Arnal Llibert o Josep Puigdesens, que se proclamaron campiones de división de honor de la mano de Rafa Montfort la temporada 1998/99.

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Fuente: Pericosonline.com

SOLUCION EN EL CENTRO

De la Peña y Moisés dan equilibrio al equipo

De la Peña y Moisés Hurtado, el día de la foto oficial del equipo.

Una de las claves en el cambio de imagen del Espanyol en las últimas jornadas la encontramos en el doble pivote del centro del campo. Valverde decidió dar continuidad ante la Real Sociedad a la pareja que ya alineara ante el Valencia, la formada por Iván de la Peña y Moisés Hurtado.El primero ha tomado el mando en lo que se refiere a la distribución y aprovecha su gran visión de juego, además de otorgar una mayor posesión del esférico al equipo blanquiazul. Por su parte, el canterano realiza todo el trabajo de recuperación y destrucción. En resumidas cuentas, el trabajo sucio.Esta variación táctica en el centro del campo, en el que Valverde había jugado hasta ahora normalmente con dos jugadores de contención, ha propiciado que el equipo pueda jugar con dos extremos natos como son Rufete y Riera y también con dos hombres en punta como Tamudo y Luis García.

Fuente: El Penalty